Dios, El Creador, no te quiero abandonar, porque si lo hago, voy a ir a la deriva hasta estrellarme.
Eres mi sónar, me guias hacia el puerto, el cual es el amor divino y el lugar sagrado.
Dios, eres la Tierra de la cual he crecido, tu me has creado.
Y ahora que estoy renovada con poder de tu amor, me dirigo a ti con miles de caras de todo nuestro ser.
Dios, déjame acercarme, que mi corazón esté lleno de tu luz.
Voy a respirar de modo que me veas siempre.
Déjame acercarme, porque estoy lista.
Súbeme, Dios, con la luz del mundo y con tu voluntad.
Te ruego, muéstrame en seguida un camino recto hacia ti y dámelo, y tendré la fuerza del amor, capaz de cambiar mundos y a mí misma.
Déjame acercarme, Dios, dame la sabiduría y las relaciones contigo que me hagan amarte cada día.
Deja que mi felicidad fluya, déjame manifestarla en realciones contigo, Dios.
Déjame acercarme a ti, lo más posible.
Enséñame a amarte, amarme a mí y a toda tu divina creación.
traducido por: Katarzyna Majda
Opublikowano: 12/08/2017
Autor: s_majda
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